El senador “colorín” se mostró satisfecho por participar en la peor derrota sufrida por el Gobierno tras rechazo del Senado a la “depreciación acelerada”.
N° 3.318 del 23 de abril al 6 de mayo del 2007
El senador Adolfo Zaldívar viene planteando desde hace mucho tiempo la necesidad de “corregir” el actual modelo económico, pero hasta el momento no ha sido escuchado por las autoridades del sector. Mucho peor todavía. El Gobierno –y particularmente el ministro de Hacienda Andrés Velasco– insiste en mantener el mismo modelo, sin cambiarle una coma. Y para Zaldívar el reciente proyecto de “depreciación acelerada” que el democratacristiano votó en contra junto a otros dos parlamentarios del bloque oficialista constituyó una tremenda derrota para el Gobierno. La derecha de Renovación y la UDI estuvo en contra, lo que en definitiva significó el rechazo del proyecto en el Senado, pasando la iniciativa a una Comisión Mixta.
Además, en dicha votación del pasado martes 18 de abril se produjo un hecho que se podría calificar de insólito, ya que los partidos de la derecha rechazaron la postura de los grandes empresarios agrupados en la Confederación de la Producción y el Comercio más la Sofofa que pedían aprobar la iniciativa.
Zaldívar dice que simplemente cumplió con lo que estimaba su deber, porque “el proyecto tal como lo presentó el Gobierno no favorecía en nada a las Pymes”.
El senador recibió en sus nuevas oficinas de calle Miraflores a Ercilla, respondiendo con mucha seguridad la seguidilla de preguntas formuladas por esta revista.
¿Qué significa corregir el modelo económico?–Para ser preciso, hemos venido hablando de esto desde fines del Gobierno de Frei. El año 1999 más o menos. Fue la primera vez que planteamos que había que corregir el modelo, o más bien la forma como se ha aplicado el modelo. Y quiero ser bien preciso: corregir la forma. De este modelo de mercado lo que nosotros queremos es hacerlo social de mercado, claramente, y eso implica que se adecúe a las necesidades de nuestro país. No es lo mismo un modelo de mercado liberal o incluso neoliberal que un modelo de economía social de mercado
N° 3.318 del 23 de abril al 6 de mayo del 2007
El senador Adolfo Zaldívar viene planteando desde hace mucho tiempo la necesidad de “corregir” el actual modelo económico, pero hasta el momento no ha sido escuchado por las autoridades del sector. Mucho peor todavía. El Gobierno –y particularmente el ministro de Hacienda Andrés Velasco– insiste en mantener el mismo modelo, sin cambiarle una coma. Y para Zaldívar el reciente proyecto de “depreciación acelerada” que el democratacristiano votó en contra junto a otros dos parlamentarios del bloque oficialista constituyó una tremenda derrota para el Gobierno. La derecha de Renovación y la UDI estuvo en contra, lo que en definitiva significó el rechazo del proyecto en el Senado, pasando la iniciativa a una Comisión Mixta.
Además, en dicha votación del pasado martes 18 de abril se produjo un hecho que se podría calificar de insólito, ya que los partidos de la derecha rechazaron la postura de los grandes empresarios agrupados en la Confederación de la Producción y el Comercio más la Sofofa que pedían aprobar la iniciativa.
Zaldívar dice que simplemente cumplió con lo que estimaba su deber, porque “el proyecto tal como lo presentó el Gobierno no favorecía en nada a las Pymes”.
El senador recibió en sus nuevas oficinas de calle Miraflores a Ercilla, respondiendo con mucha seguridad la seguidilla de preguntas formuladas por esta revista.
¿Qué significa corregir el modelo económico?–Para ser preciso, hemos venido hablando de esto desde fines del Gobierno de Frei. El año 1999 más o menos. Fue la primera vez que planteamos que había que corregir el modelo, o más bien la forma como se ha aplicado el modelo. Y quiero ser bien preciso: corregir la forma. De este modelo de mercado lo que nosotros queremos es hacerlo social de mercado, claramente, y eso implica que se adecúe a las necesidades de nuestro país. No es lo mismo un modelo de mercado liberal o incluso neoliberal que un modelo de economía social de mercado
