Lorenzini: Propuesta de Ravinet busca quitarle el cupo a los que tienen respaldo ciudadano

Antidemocrática y como una fórmula de las cúpulas para ir sacando rivales del camino, calificó el diputado de la Democracia Cristiana Pablo Lorenzini la propuesta hecha por el ex ministro Jaime Ravinet, que busca negar cupos parlamentarios a los militantes de la Falange que desconozcan los acuerdos suscritos por el partido.Ayer, el Consejo Nacional de la colectividad decidió postergar la discusión de esta propuesta, fijando una sesión especial para tratarla en profundidad.Lorenzini se mostró dispuesto a realizar un análisis al interior del Consejo de la DC, sin embargo, señaló que "no es el minuto" -debido a que el viernes el Tribunal Supremo se pronunciará sobre el caso de Adolfo Zaldívar- y la propuesta de Ravinet podría incluso ampliarse a alcaldes y concejales, por lo que se necesita de un debate más amplio.Lorenzini deja clara su posición señalando que "esto es por las cúpulas, que se asustan, que pierden poder, que pierden votación", aludiendo que la intención de fondo es entregar aquellos cupos a los que actualmente no tienen el respaldo ciudadano o cabida en la escena pública, como el ex ministro Ravinet."¿Ravinet a quién representa? Fue el consejero que sacó menos votos, fue el último en entrar de los 18 consejeros, hace ratito que no se testea públicamente en términos ciudadanos. Entonces, al final qué es lo que se pretende: quitarle los cupos a los que tienen respaldo, porque defienden a la gente, para dárselo a aquellos que no tiene ninguna otra opción de ganarse a los militantes y el respaldo", sostiene el diputado DC.Sin acusar directamente una intención de Ravinet de sacar del camino a Zaldívar -ya que aclara que ambos trabajaron políticamente juntos- Lorenzini continúa señalando que "ahora (Ravinet) aparezca en la línea contraria, yo no sé si es un oportunismo para introducirse al sistema, no tengo idea, pero para los que están mandando es muy atractiva la idea, porque con eso se sacan los contrincantes antidemocráticamente de la oposición".El parlamentario estima que la propuesta sería difícil de aplicar porque deja un margen muy amplio de interpretación, por lo que prefiere que en estos casos las sanciones vengan directamente del electorado y no de las cúpulas políticas. "En una democracia normal la sanción la dan los electores, los militantes. Si a mí los electores de mi distrito me respaldan, no veo cómo cuatro o cinco personas sentadas en la directiva - sea quien sea- vayan a sacarte del cupo", indica.Para Lorenzini, esta idea sería en términos reales "bastante complicada", ya que según recuerda en los últimos cincos años desde la propia Soledad Alvear, pasando por Jorge Pizarro, Mariano Ruiz-Esquide, Eduardo Frei, y Adolfo Zaldívar, han mostrado posiciones contrarias a las directivas de turno.Finalmente argumenta que no se puede barajar una fórmula para "designar los candidatos a dedo o sacar los candidatos que le molesten a la directiva" o "manejar con el susto y el miedo a las candidaturas parlamentarias, a concejales y alcaldes, a través de alguien que diga cuándo te saliste de la raya"."Yo por lo menos no concuerdo con la propuesta, escapa al actual sistema democrático que tenemos", concluye.