Luis Ajenjo, el ex presidente de EFE a quien el CDE acusa de malversación de caudales públicos en la causa que indaga irregularidades en la empresa estatal durante su gestión (2003-2006), pasó a la ofensiva. El jueves recién pasado presentó una querella por obstrucción a la investigación en contra de un testigo del caso que lo acusó ante los fiscales de haber usado recursos de la empresa en gastos de representación excesivos y en la compra irregular de pasajes aéreos.
La querella del ex ejecutivo de Ferrocarriles apunta a Héctor Dimán, un funcionario de la repartición que en la época de Ajenjo administraba una cuenta de fondos a rendir y que dependía jerárquicamente del ex gerente de Administración Claudio Carreño, formalizado por 65 delitos de fraude al Fisco.
Dimán dijo a los fiscales que durante el período de Ajenjo habían aumentado drásticamente los gastos de representación y que el ex presidente de la estatal gastaba unos $ 2 millones semanales en almuerzos con periodistas y personas de marketing. También lo acusó de comprar pasajes de avión en primera clase junto al ex gerente de Finanzas, Jorge Letelier, los cuales cambiaba después en la agencia de viajes para quedarse con el saldo a favor.
Junto con tildar públicamente de "falsa" la acusación (que fue indagada por Investigaciones en la propia agencia de viajes involucrada), Ajenjo optó por la querella en contra de Dimán. Esto, en momentos en que cercanos a su defensa asumen prácticamente como un hecho que el suspendido militante DC va a ser formalizado por el pago de $ 14,4 millones que hizo EFE a Patricio de Gregorio por asesorías que nunca fueron realizadas.
La querella del ex ejecutivo de Ferrocarriles apunta a Héctor Dimán, un funcionario de la repartición que en la época de Ajenjo administraba una cuenta de fondos a rendir y que dependía jerárquicamente del ex gerente de Administración Claudio Carreño, formalizado por 65 delitos de fraude al Fisco.
Dimán dijo a los fiscales que durante el período de Ajenjo habían aumentado drásticamente los gastos de representación y que el ex presidente de la estatal gastaba unos $ 2 millones semanales en almuerzos con periodistas y personas de marketing. También lo acusó de comprar pasajes de avión en primera clase junto al ex gerente de Finanzas, Jorge Letelier, los cuales cambiaba después en la agencia de viajes para quedarse con el saldo a favor.
Junto con tildar públicamente de "falsa" la acusación (que fue indagada por Investigaciones en la propia agencia de viajes involucrada), Ajenjo optó por la querella en contra de Dimán. Esto, en momentos en que cercanos a su defensa asumen prácticamente como un hecho que el suspendido militante DC va a ser formalizado por el pago de $ 14,4 millones que hizo EFE a Patricio de Gregorio por asesorías que nunca fueron realizadas.
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